La radiación ultravioleta fue descubierta en 1801 por el físico alemán Johann Wilhelm Ritter, sin embargo, ya estaba presente incluso durante la formación de la Tierra, (nos llega a través del sol), y ha sido vital para la aparición de la vida, dado que es un reactivo para muchos procesos (bío)químicos, como es por ejemplo el de la fotosíntesis de las plantas.